Publicado por Cualquier incidente relacionado con el fuego en una vivienda puede resultar devastador. Las empresas aseguradoras ofrecen ciertas coberturas para proteger las viviendas y su contenido del ataque fulminante de las llamas.
Solo entre 2021 y 2022, las aseguradoras tuvieron que atender incidentes relacionados con el fuego cada siete minutos y medio. Estas cifras de la Unespa, la asociación que agrupa las entidades aseguradoras de España, reflejan la importancia de disponer de un seguro de hogar con cobertura de incendios.
Coberturas en caso de incendio en el hogar
Existen dos condiciones básicas para que la aseguradora aplique las indemnizaciones pertinentes en caso de incendio:
- Que éste no haya sido intencionado.
- Que no se haya producido como consecuencia de alguna negligencia.
Una vez que la aseguradora verifica que se ha tratado de un accidente, la compañía procede a aplicar las coberturas indicadas en el contrato. Estas son las más habituales:
- Continente de la vivienda: todos los daños relacionados con la estructura del inmueble (cerramientos, paredes, techos, tabiques…).
- Contenido de la vivienda: la relación de objetos acordada en el momento de la suscripción de la póliza y el valor total asegurado.
- Exteriores de la vivienda: en el seguro de incendios también se puede especificar la cobertura de daños en el exterior, como jardín, árboles, césped o piscina.
- Gastos de extinción: si hubiera sido necesaria la intervención del servicio de bomberos, la compañía podría correr con estos gastos.
¿Cómo actuar si has sufrido un incendio en casa?
Los seguros de hogar garantizan tu tranquilidad en caso de sufrir un incendio en casa. Pero para poder hacer uso de sus coberturas, es importante seguir el siguiente protocolo:
- No tocar ni mover nada. Los daños producidos y los objetos quemados deben permanecer tal como quedaron.
- Tomar fotografías de los daños y hacer un inventario de estos, incluyendo los objetos que hayan podido desaparecer entre las llamas.
- Notificar el siniestro a la compañía aseguradora en el plazo de 5 días tras haberse producido el incendio o explosión.
Con toda la documentación, tanto la aseguradora como las autoridades (en caso de que fuera necesaria su intervención), podrán determinar el valor de los daños sufridos y calcular las indemnizaciones correspondientes.
