Septiembre: buenos propósitos y buenos seguros

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Para la mayoría de los mortales septiembre es el mes idóneo para plantearse nuevos propósitos. Y para hacer cambios en nuestras vidas que marquen la diferencia: apuntarse al gimnasio, retomar las clases de pintura, aprender un nuevo idioma, empezar ese coleccionable de películas, figuritas, o cucharas del mundo, y por qué no, hacer un entretenido curso de cocina. La intención está ahí y parece que a todos nos aflora al terminar el verano.

Además, después del año pasado, podría decirse que este nuevo septiembre ha arrancado con cierta normalidad. Y es por eso que tenemos muchas ganas de volver a hacer todas las cosas que no pudimos realizar el año pasado. O que queramos hacer muchas otras por lo que pueda pasar.

La vuelta al cole y la vuelta a la oficina, por ejemplo, son los dos grandes protagonistas del mes de septiembre. Considerándose a su vez uno de los momentos financieros más críticos del año, no solo en España sino en todo el mundo. Por ejemplo, aquí, la vuelta al cole supone un desembolso anual para las familias de 1.937 euros de media por hijo. 1.071 euros si es en un centro público y 2.622 en centros concertados y a 6.123 euros en centros privados, según una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Y volver a la oficina nos va a suponer volver a incluir gastos de transporte, gasolina, comidas fuera de casa en nuestro presupuesto que el año pasado apenas contemplamos.

A los gastos escolares podemos sumar el gasto en mascarillas, desinfectante o gel hidro alcohólico Que incluiremos en las mochilas de nuestros hijos y en nuestros bolsos y carteras.

Nadie se plantea en ningún caso dejar de realizar estos desembolsos cuando llega septiembre. Y la pregunta es ¿por qué no hacer lo mismo al pensar en la contratación de un seguro de vida?

Todos sabemos que no es obligatorio contratar uno, pero nadie duda en asegurar su casa, su coche o el ordenador que acabas de comprar a tus hijos. Pero ¿y por qué nos los pensamos tanto? Seguramente, porque damos por hecho que siempre vamos a gozar de salud. A nadie le gusta pensar lo contrario. Pero esos “por si acasos” que contemplamos como probables en el mundo material ni nos los cuestionamos creyendo que hay más posibilidades de que un tornado arrase nuestra casa que de contraer una enfermedad o tener un accidente.

Si no lo contratamos, lo único que conseguimos es dejar en una situación comprometida a nuestra pareja, hijos o seres queridos. ¿Por qué no arrancar el nuevo curso escolar dando esa tranquilidad económica y financiera a tu entorno y a ti misma?

Cuántas veces nos hemos apuntado al gimnasio desembolsando la matrícula de inscripción, la cuota mensual, e invirtiendo en ropa deportiva para no pisarlo más que una vez. Si estábamos pensando en invertir en mejorar, contratar un seguro de vida es sin duda una excelente opción que no te va a costar mucho.

Para tu tranquilidad, contratar un seguro de vida te puede costar la tercera parte de lo que te costaría contratar un seguro de coche con franquicia. O la décima parte de un todo riesgo si el coche es nuevo. El seguro de vida va a depender tu edad y de la indemnización que quieras recibir en caso de que algo te suceda. Por eso contratar un seguro te puede salir por lo mismo que gastas en móvil al mes.

Entonces, ¿cuánto debo gastar en mi seguro de vida? Pues dependerá de cuál sea tu salario, tu nivel de vida, gastos habituales, préstamos, hipotecas y otros aspectos a analizar.

Con la contratación de un seguro de vida, bien asesorado, te estarás asegurando a ti y a los tuyos no pagar más de lo necesario ni recibir menos de lo que vayas a precisar.

Lo primero que debes saber es que un seguro de vida no solo cubre el fallecimiento del asegurado. Sino que existen casos en los que puedes recibir una indemnización en caso quedar incapacitado. Y si es por accidente, el capital que recibas puede ser incluso mayor, dependiendo de las coberturas contratadas.

Elegir contratar nuestro seguro de vida es una decisión muy importante y septiembre es un excelente mes para hacerlo.

Por todo ello, si te decides a contratarlo, en Pelayo Vida tenemos el seguro de vida que necesitas. Con él garantizamos tu tranquilidad, la de los tuyos y su futuro económico.

Y además, si eres mujer, contamos con un seguro especialmente diseñado para ti, como es el caso del seguro Vida Mujer de Pelayo Vida. Un seguro de vida que te apoya en cualquier circunstancia, con garantías, cobertura y servicios en situaciones como el diagnóstico de un cáncer femenino. Y es que el seguro Vida Mujer de Pelayo Vida, además de las habituales coberturas por fallecimiento e invalidez por accidente, o por cualquier causa, en caso de padecer algún cáncer femenino, contempla el pago de un capital. Asimismo, una vez abonada la prestación por la contingencia del cáncer femenino, se mantiene el contrato en vigor para el resto de coberturas.

¿Quieres asegurar el futuro de los tuyos en el plano económico? Asesórate sobre qué producto es el que mejor se adecúa a lo que quieres para ellos. Y recuerda: en Pelayo Vida estamos a tu disposición para ayudarte.